La jerarquía visual es un principio del diseño que organiza los elementos gráficos, como texto, imágenes y colores, de manera que guíen la atención de la audiencia hacia lo más importante primero, y luego hacia lo secundario. Además de ser estéticamente adecuada, la jerarquía visual ayuda a comunicar el mensaje de forma clara y rápida, evita que la audiencia se sienta perdida o abrumada porque orienta la atención hacia lo que realmente importa.
Cuando se diseña una diapositiva hay que plantearse qué es lo que deseamos que sea notado de primero, probablemente el título y alguna información puntual y relevante del contenido. Estas son las partes que debemos destacar mediante elementos que crean jerarquía visual.
Las características que crean jerarquía visual y que podemos aplicar a los diferentes elementos que se incorporen a las dispositivas, son:
- Tamaño
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Los elementos más grandes llaman más la atención.
- Color
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Colores contrastantes o brillantes destacan más.
- Peso tipográfico
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Negritas, cursivas sombreados o mayúsculas pueden resaltar partes del texto.
- Ubicación
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Lo que está en la parte superior o centrado suele verse primero.
- Espacio
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El uso de espacio en blanco alrededor de un elemento lo puede hacer destacar.
- Estilo
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Diferentes tipos de fuente o estilos gráficos artísticos pueden marcar niveles de importancia.
El manejo de estos elementos debe ser equilibrado, al tratar de resaltar cierto contenido se debe evitar caer en los excesos y la saturación del espacio. Siempre es recomendable valorar si toda la información que se está colocando es necesaria, si puede omitirse o si bien podría incluirse en otro espacio.