El uso de herramientas colaborativas implica acceder a diversos recursos digitales que deben ser utilizados con conciencia y respeto. A continuación, veremos consideraciones claves para un uso responsable, abordando aspectos como la gestión del almacenamiento, la optimización de la comunicación y el cumplimiento de las políticas de uso. Adquirir estas buenas prácticas permite a los usuarios ser más efectivos y contribuir a un entorno colaborativo digital más saludable.
