Saltar la navegación

Acoso sexual en el transporte público


El acoso sexual en el transporte público es una acción violenta y ofensiva que afecta de modo físico, emocional y psicológico a las víctimas; además, causa inseguridad y temor, lo que dificulta disfrutar del derecho a una vida segura y digna con el que deben contar las personas en Costa Rica.
Este tipo de acoso se refiere a: “cualquier tipo de comportamiento no deseado de naturaleza sexual que tenga lugar en un contexto de acceso o uso de servicios de transporte público” (Organización Mundial de la Salud, 2012).
El acoso sexual en el transporte público es una forma de violencia sexual y discriminación de género que se dirige mayoritariamente hacia las niñas, las mujeres y las personas LGBTQ+; además, afecta a personas de todas las edades y condiciones, pero se da especialmente en mujeres jóvenes. Es importante enfatizar que si bien lo sufren principalmente las mujeres; los niños y hombres también son víctimas de estas conductas inapropiadas.
Este tipo de acoso puede trabajarse con diferentes medidas preventivas y de intervención, como podrían ser: campañas de sensibilización pública, capacitación para el personal del transporte público, instalación de cámaras de seguridad en los vehículos, difusión de los protocolos que se deben aplicar, informar sobre la posibilidad existente de denunciar el acoso sexual, brindar servicios de apoyo y asesoramiento para las personas afectadas y prestatarias de servicios de transporte público.
En Costa Rica existen programas e iniciativas gubernamentales y no gubernamentales destinados a prevenir y erradicar la violencia sexual, en el país se cuenta con amplia legislación destinada a proteger a las personas contra la violencia sexual y se están ejecutando medidas que garanticen la implementación de estas leyes. 


El papel de la cultura en el acoso sexual 

La violencia se encuentra arraigada en las estructuras sociales y culturales de la sociedad; por tanto, no se debe entender como un acto individual de una persona agresora, sino como un producto de relaciones sociales que permiten y justifican la violencia.
La cultura reproduce conductas de acoso sexual al normalizar la idea de que las personas pueden ser vistas como objetos sexuales utilizables a disposición de quienes les rodean o al representar la violencia sexual de manera atractiva y encubierta en los medios de comunicación.
La cultura popular influye en la forma en que se piensa sobre la masculinidad y la feminidad, donde se reproducen estereotipos de género que causan discriminación, abuso e irrespeto de diversas maneras, permitiendo que se naturalicen y reproduzcan manifestaciones de acoso sexual en el transporte público con naturalidad, como si se tratase de algo permitido y no lo que realmente es, actos ilegales, inaceptables e improcedentes.


Definiciones de acoso sexual callejero y en el transporte público


Según la Ley N° 9877


Se entiende por acoso sexual callejero: toda conducta o conductas con connotación sexual y con carácter unidireccional, sin que medie el consentimiento ni la aceptación de la persona o las personas a la que está dirigida, con potencial de causar molestia, malestar, intimidación, humillación, inseguridad, miedo y ofensa, que proviene generalmente de una persona desconocida para quien la recibe y que tiene lugar en espacios públicos o de acceso público. (SINALEVI, 2020, p.1).

"El acoso sexual en el transporte público se define como todo comportamiento, gesto, acción o palabra no deseada de naturaleza sexual que tenga el propósito o el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, en particular, cuando crea un entorno intimidatorio, hostil, degradante, humillante u ofensivo".(Unión Internacional de Transportes Públicos, 2010, p. 7).

"El acoso sexual en el transporte público se refiere a toda conducta de índole sexual no deseada y no solicitada que tiene lugar en el transporte público y que tiene como objetivo intimidar, humillar o degradar a la persona que la sufre". (Vargas, 2016, p. 78).

"El acoso sexual en el transporte público consiste en cualquier tipo de contacto, verbal o físico, de naturaleza sexual, no deseado por la persona destinataria, que se produce en el entorno del transporte público". (Jiménez, 2013, p. 49).

"El acoso sexual en el transporte público se define como una forma de violencia sexual que ocurre en espacios públicos de transporte, en la cual una persona es sometida a conductas verbales o físicas de naturaleza sexual no deseadas". (Tolón-Becerra et al., 2020, p. 8).

"El acoso sexual en el transporte público se refiere a cualquier comportamiento sexual no deseado que una persona recibe mientras viaja en transporte público, incluyendo gestos, comentarios, miradas lascivas, tocamientos y exposición de los genitales". (Amnesty International, 2018, p. 2).


Tipos de acoso sexual en el transporte público

Existen diferentes tipos de acoso sexual que pueden ocurrir en el transporte público, entre ellos están:

Haga clic sobre cada uno de ellos para observar mayor información.

Verbal:

comentarios ofensivos, piropos vulgares, las insinuaciones sexuales, gemidos, silbidos, ruidos, chistes con contenido sexual y cualquier otro tipo de lenguaje.

No Verbal:

miradas lascivas, jadeos, gestos, ademanes, imágenes pornográficas, exhibicionismo o masturbación.                                                                                                                    

Fisico:

contacto físico no deseado como tocamientos, roces, empujones o golpes con intención sexual, persecución o acorralamiento.

Material audio visual:

fotos, vídeos o grabaciones con motivos sexuales

                                                                                                                                                                                                                                    

 

Causas


El acoso sexual en el transporte público es un problema social que puede tener diferentes causas y factores por ejemplo, los roles de género tradicionales donde los hombres deben ser dominantes y agresivos, mientras que las mujeres deben ser sumisas y complacientes. Esto puede causar que algunos hombres crean que está bien intimidar o acosar a las mujeres en público.
También puede influir como las mujeres perciben y experimentan el acoso sexual en el transporte público, porque se les enseña a ser sumisas, obedientes y evitar la confrontación y la violencia. Por esta razón algunas mujeres se sienten menos seguras para responder o denunciar; además, pueden creer que es algo normal de la vida cotidiana, porque se les ha enseñado a aceptar y minimizar el comportamiento agresivo de los hombres.

Dentro de otras causas del acoso sexual en el transporte público se encuentran las siguientes:

Haga clic sobre cada una de ellas.


Cultura machista:

Hace que en la sociedad las mujeres sean vistas y tratadas como objetos sexuales y se les juzga y valora por su apariencia física. La cultura machista causa actitudes y comportamientos de acoso sexual hacia las mujeres, niñas, niños, adultas y adultos mayores o cualquier persona que sea vista como vulnerable o débil en el transporte público.

Impunidad:

Las personas que cometen acoso sexual en el transporte público en ocasiones no son castigadas por sus faltas, lo que causa una sensación de que no se sancionan estas acciones y anima a otras personas a seguir cometiendo este tipo de delitos.

Falta de seguridad:

En algunos medios de transporte público, la falta de iluminación, vigilancia y seguridad hace que las personas acosadoras se sientan más seguras para cometer sus conductas irrespetuosas e inapropiadas.

Estereotipos de género:

Pueden hacer que los hombres crean que tienen derecho a intimidar o acosar a las mujeres y que las mujeres deben ser sumisas y aceptar este tipo de comportamientos.

Cultura del silencio:

La cultura del silencio se refiere a que muchas personas no denuncian estas conductas porque tienen miedo de ser juzgadas o no ser tomadas en serio, lo que permite que se repita y se vea como normal el acoso sexual en el transporte público por la naturalización de la violencia, que causa que no se vea como un delito este tipo de actos violentos de naturaleza sexual.



Efectos negativos


El acoso sexual en el transporte público tiene efectos negativos graves en las víctimas, en cuanto a salud mental las personas pueden sufrir trastornos emocionales como ansiedad, depresión y trastornos de estrés postraumático. Por lo tanto, es importante tratar el problema, no solo para prevenir, sino también para ayudar a las personas que ya han sufrido este tipo de violencia.
A continuación, se presentan ejemplos de los efectos que puede tener el acoso sexual en el transporte público:

Haga clic en las flechas laterales para observar información de cada uno de ellos.




Importancia de las personas conductoras


En las situaciones que ocurren en el transporte público, la persona conductora tiene un papel clave en la prevención y atención del acoso sexual, porque son la primera línea de atención al público, pueden: detectar, prevenir, brindar apoyo a las víctimas y garantizar que se respeten sus derechos. Por ello, la necesidad de brindar capacitación y sensibilización en la temática.
Con este curso se busca proporcionar en las personas conductoras del transporte público las herramientas y habilidades necesarias para la prevención y atención de situaciones de acoso sexual en el transporte público, principalmente de autobús.
Es necesario educar a las personas conductoras del transporte público para que puedan atender las conductas de acoso sexual que pueda presentarse en su lugar de trabajo de forma correcta, para garantizar la seguridad y ambiente de paz para todas las personas, incluida la persona conductora.

Creado con eXeLearning (Ventana nueva)