Dentro de los principales beneficios que obtendremos  podemos citar

  • Un Estado cercano a la ciudadanía: deberes y derechos van de la mano
    • Terminar con la peregrinación por oficinas
    • Acortar los tiempos de trámites (recepción y envío de documentos para que sean suscritos)
    • Desburocratización, desconcentración y acercamiento: un Estado que va hacia las personas

 

  • Reducción de los costos operativos, derivados de la eliminación de documentos en papel:
    • No es necesario recopilar firmas ni papel
    • No es necesaria la verificación manual de las firmas que, además de consumir tiempo, exigen mano de obra especializada.
    • Eliminación de recursos de gestión electrónica de documentos, puesto que no es necesario escanear papeles.
    • Eliminación de la necesidad de archivar documentos físicos

 

  • Aumento de costos de captación, sin comprometer la seguridad y con un aumento de la productividad.

 

  • Facilita el acceso a la información, ya que se podrán realizar trámites ante el Estado y sus instituciones en forma segura.

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